Un alto consumo de antioxidantes se asocia con un menor riesgo de degeneración macular temprana relacionada con la edad (DMAE) en individuos genéticamente predispuestos, de acuerdo con los resultados de un estudio publicado en la edición de junio de la revista Archives of Ophthalmology.

Se evaluó el consumo de antioxidantes, zinc y ácidos grasos ω-3 y se investigó el efecto de reducción del riesgo de estos nutrientes en los distintos genotipos del CFH [ factor de complemento H] Y402H y A69S LOC387715.

Se encontró que una alta ingesta diaria de nutrientes con propiedades antioxidantes reduce el riesgo de DMAE precoz en aquellos sujetos con alto riesgo genético.
Los cereales fortificados, las carnes, productos lácteos, frutos secos y las semillas son una buena fuente de zinc. Las hortalizas de hoja de color verde oscuro como la espinaca y las verduras de color naranja como las zanahorias y la calabaza son ricas en β-caroteno y luteína/zeaxantina. Pescados como el arenque, salmón, sardinas, trucha y el atún nos proporcionan acidos grasos Omega-3. Además existen en el mercado suplementos nutricionales especificos para la visión que contienen todos estos nutrientes esenciales.