El queratocono es una enfermedad progresiva de la córnea en la que se produce una protrusión cónica de la misma con adelgazamiento progresivo y aparición de miopía y astigmatismo irregular. Normalmente la enfermedad debuta en la adolescencia y suele estabilizarse en la cuarta década de la vida. Cuando progresa a casos avanzados puede producirse además cicatrización estromal anterior y/o hydrops corneal, siendo la única alternativa de tratamiento la queratoplastia.
Cuando el queratocono aparece en niños es un factor de mal pronóstico, ya que en estos casos pueden presentar una rápida progresión y deterioro de la visión que en esta edad puede asociarse además al desarrollo de la ambliopía. Por ello, es muy importante detectar a tiempo y tratar adecuadamente el queratocono en niños para evitar que progrese a estadios avanzados y evitar la queratoplastia, que en pacientes pediátricos tiene peor pronóstico que en adultos.
El cross-linking de colágeno es un procedimiento que sirve para detener la progresión del queratocono gracias al endurecimiento de la córnea merced de la formación de enlaces covalentes entre las fibras de colágeno. Sin embargo, la mayoría de los estudios que han demostrado su eficacia y seguridad han sido realizados en adultos, aunque cada vez más tenemos evidencia de sus resultados en niños.
Me gustaría compartir la que parece es hasta la fecha la serie con mayor número de ojos y mayor seguimiento acerca de la eficacia y seguridad del cross-linking para frenar la progresión del queratocono en niños, publicada recientemente en la revista Cornea.
Padmanabhan y colaboradores, del Medical Research Foundation Sankara Nethralaya, India, realizaron un estudio retrospectivo de 194 ojos de 153 pacientes pediátricos (menores de 18 años) con queratocono progresivo que recibieron cross-linking EPI-OFF utilizando en protocolo de Dresden. Se utilizó rivoflabina hipoosmolar en aquellos pacientes con paquimetría inferior a 450 micras. El seguimiento medio fue de 3.5 años (2-6.7 años). No hubo ninguna complicación directa derivada del procedimiento quirúrgico.
Resultados visuales:
La agudeza visual mejor corregida (AVMC) mejoró de 0.33 a 0.27 unidades LogMAR, p<0.0001. En el 80.1% de los casos la AVMC mejoró o permaneció estable a 2 años y en el 69.1% de los casos en la última visita de seguimiento, entre 4 y 6.7 años.
Resultados topográficos y tomográficos:
La queratometría media disminuyó 1.7D, p<0.0001; y el cilindro topográfico se redujo en 1.08D, p=0.0001. La queratometría máxima (Kmax) disminuyó 1.2D, p=0.0002, con un aumento inicial en los primeros 3 meses y un aplanamiento progresivo posterior. Sin embargo, se observó un incurvamiento de Kmax >1D en el 15% de los casos a los 2 años, 21% a los 4 años y 24% en adelante.
La paquimetría en la posición más fina disminuyó 31.1 micras tras el cross-linking, p<0.0001. Se produjo una disminución acusada en los primeros 3 meses con una tendencia al aumento y estabilización a lo largo del seguimiento. Esto es debido a un compactamiento estromal inicial que se produce como consecuencia de la formación de los enlaces covalentes entre las fibras de colágeno.
Es interesante el hecho de que no hubo correlación estadística entre el aumento de Kmax y los cambios de AVMC y paquimetría a partir de los 4 años. Esto nos debe hacer ser cautos a la hora de indicar un retratamiento de cross-linking en niños.
Conclusiones:
Los resultados de este estudio muestran que el cross-linking es eficaz y seguro en la estabilización del queratocono en la mayoría de los casos en los pacientes pediátricos. Sin embargo, son necesarios nuevos estudios con mayor seguimiento para comprender los cambios que se producen en la córnea de los niños a largo plazo tras el cross-linking y establecer mejor los criterios de retratamiento.
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Bibliografía:
- Padmanabhan P, Rachapalle Reddi S, Rajagopal R, Natarajan R, Iyer G, Srinivasan B, Narayanan N, Lakshmipathy M, Agarwal S. Corneal Collagen Cross-Linking for Keratoconus in Pediatric Patients-Long-Term Results. 2017 Feb;36(2):138-143.